Génesis 26:2
Y se le apareció El Señor, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré.
Isaac estaba en un lugar, que no era su tierra, su pueblo, su cultura.
Para empeorar la situación, un lugar de miseria y hambre, el más completo caos.
De repente, el toma una decisión inteligente, me voy…
¿Para donde?
el lugar mas próspero que había; el Egipto.
Sólo que en medio de esta decisión, Dios aparece para El y le habla, no vaya, queda.
Porque aquí, Yo te bendeciré.
¿Que haría usted?
¿Excusas? ¡muchas!
No es mi tierra, mi pueblo, mi cultura, estoy casi pasando necesidad, el Egipto es “primer mundo”, etc…
Luego el no discutió, no dio excusas, apenas obedeció,
“Habitó, pues, Isaac en Gerar.” Vers.6
A veces echamos la culpa de nuestros problemas en la crisis, en el país, en el patrón,…
Sabes que; lo que tenemos que hacer es nada más y nada menos que obedecer la voz de Dios.
¿Que tengo que hacer?
Orar, perseverar, diezmar, hacer cadenas de oración, ayunar…
“Ok”
Voy apenas obedecer, más no con los brazos cruzados, pues está escrito;
“Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo El Señor.” Vers. 12
El obedeció y también sembró, no se quede parado, quiere ser patrón, haga proyectos y empiece a dar los primeros pasos, para tornar este sueño en realidad.
